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Los caballitos de mar son una de las especies marinas más fascinantes por su colorido, por su forma y también por su comportamiento. Existen multitud de especies, pero todos tienen algo en común: Su monogamia y su original forma de procrear y gestar.
En primer lugar, su proceso de apareamiento es precioso. Comienza con un baile lleno de ternura en el que los caballitos entrelazan sus colas. Una vez que se ha producido la fecundación. la hembra transfiere los huevos al macho. Finalmente será el macho quien los portará en un saco durante la gestación, durante unas semanas. Es la única especie en la que es el macho quien queda embarazado.
Cuando en Palma Aquarium detectamos un macho embarazado lo llevamos a una zona de cuarentena. De esta forma podemos garantizar su reposo y el entorno más adecuado para el nacimiento de los pequeños. El momento del parto es asombroso. Debido a que suelen dar a luz al amanecer, cuando cientos de diminutos caballitos de mar salen del saco. En la naturaleza solo un 2% de ellos sobrevive, pero en Palma Aquarium la cifra de supervivencia es más alta. En mar abierto el índice de supervivencia baja muchísimo porque hay muchos depredadores, ya que son muchos los peces que se alimentan de larvas de otras especies.
Así crecen los caballitos de mar
A partir de este momento, estos bebés crecerán en cuarentena durante los primeros meses. Hasta que tengan el tamaño adecuado para trasladarlos al tanque con un medio artificial controlado. Este proceso suele durar unos 4 o 5 meses. Durante este tiempo mantienen un color oscuro, como un tono negro parduzco. Este color es un medio de defensa durante la primera etapa de su vida, al ser mucho más difícil que los perciban los depredadores.
En este vídeo sobre el embarazo del caballito de mar podemos ver cómo se produce el traslado de huevos de la hembra al macho. además podemos observar el parto en cuarentena y los pequeños caballitos de mar a la edad de dos meses, cuando apenas miden medio centímetro.
En nuestro centro conseguimos estudiar y desarrollar estos procesos. Con esto logramos conocer mejor las diferentes especies, sus necesidades, y difundir este conocimiento entre nuestros visitantes, así como concienciar de la delicadeza del mundo marino y la importancia de respetarlo y preservarlo.
